Peter Lindbergh (nacido como Peter Brodbeck; Leszno, 23 de noviembre 1944-3 de septiembre de 2019)1 fue un fotógrafo de moda alemán.
Biografía
Nació en la región de Wartheland, en la Polonia ocupada, y se crio en Duisburgo (en la actual Renania del Norte-Westfalia, Alemania), junto a su padre, un vendedor de dulces, su madre, una ama de casa y dos hermanos.
Después de completar la escuela primaria, trabajó allí como escaparatista para las cadenas de tiendas departamentales Karstadt y Horten.
A los dieciocho años se fue a Suiza donde tras permanecer diez meses se mudó de Lucerna a Berlín. Allí recibió clases nocturnas en la Academia de Arte. Siguiendo los pasos de su modelo Vincent van Gogh, hizo autostop a Arlés. Después de varios meses en Arlés, viajó por España y Marruecos, durante dos años, para luego regresar nuevamente a Alemania.
Lindbergh empezó a estudiar pintura en la Escuela Superior de Bellas Artes de Krefeld (Renania del Norte-Westfalia). Durante sus primeros años de estudio realizó la primera exposición de su obra en 1969 en la galería Denise René-Hans Mayer. Pero fue el arte conceptual lo último que influyó en la fase final de sus estudios de artes visuales. En 1971 utilizó la fotografía como su medio de expresión, empezando a trabajar durante dos años como asistente del fotógrafo Hans Lux en Düsseldorf, dedicándose posteriormente de manera independiente como fotógrafo publicitario.
Más adelante se trasladó a París en 1978 para concentrarse en la alta costura. Allí fotografió a varias modelos como Christy Turlington, Naomi Campbell, Linda Evangelista, Cindy Crawford, Stephanie Seymour, Isabella Rossellini, Nastassja Kinski y Tatjana Patitz, y emprendió otros proyectos junto con Karl Lagerfeld, Giorgio Armani y muchos más. Sus fotografías han sido publicadas por revistas, como Stern, Harper's Bazaar y Vogue.
Considerado como uno de los fotógrafos del mundo de la moda por excelencia, sobre todo en blanco y negro. Ayudó a crear el fenómeno top model de la década de 1990.2 Él prefería que su modelo tuviera un maquillaje mínimo y un peinado sencillo. Wim Wenders fue un admirador de su obra.
Se casó en segundo matrimonio y fue padre de cuatro hijos.
El 3 de septiembre de 2019, falleció a los 74 años.