Ficus talado y arrancado. Alicante

miércoles, 13 de marzo de 2024

Doscientos años de la muerte de José Ginés y Martín, escultor del siglo XVIII y XIX nacido en Polop de la Marina. Sello de la Sangra Familia de 1961

 

                                  (Sello de Correos de 1961 con una obra de José Ginés)

José Ginés y Marín (Polop, 29 de marzo de 1768 - falleció en Madrid, 14 de febrero de 1823 cuando se encontraba trabajando) fue un escultor y pintor español. Estaba trabajando en el Busto de Fernando VII, modelado en yeso cuando falleció y que terminó su hijo José Ginés Fernández.

Biografía

Se comenzó a formar en la escuela de Polop y de la mano de su tío Mossén Ginés, pero pronto pasaría a la Academia de San Carlos en Valencia y posteriormente en la de San Fernando en Madrid.1​ Su obra fue bien valorada y recibió varios premios a lo largo de su carrera. Fue nombrado Escultor de Cámara honorario del rey Carlos IV en 1794 y 1799 estuquista de cámara (donde comenzó a trabajar realizando estucos para la Casa del Labrador de Aranjuez y el Real Sitio, también en el Palacio Real). En 1816 ascendió Primer escultor de cámara de su sucesor, Fernando VII, a la muerte de Juan Adán. Paralelamente en 1814 ya había sido nombrado académico de mérito en San Fernando donde luego sería teniente director de escultura y director de sección. Fue nombrado director de la Academia junto a Pedro Hermoso el 6 de noviembre de 1817.

Sus primeras obras premiadas Apolino (barro cocido) y Convite de Dionisio "El Tirano" a Damocles (relieve en barro cocido) aún se conservan en la Academia. Falleció repentinamente en 1823 hecho que truncó una carrera excepcional.

Su versatilidad le permitió afrontar el barroco más absoluto y al mismo tiempo adentrarse en el neoclasicismo, prueba de ello resultan sus encargos más famosos. Entre 1789 y 1794 realizó un enorme ciclo de esculturas en barro cocido y policromado (la Matanza de los inocentes) por encargo del entonces Príncipe de Asturias, don Carlos IV, para complementar el aún hoy conocido Nacimiento o Belén del Príncipe. El conjunto llegó a contar con hasta 5950 figuras, incluida otra serie en la que también participó Ginés, la adoración de los pastores. En todas ellas hizo gala de sus dotes artísticas desafiando las formas del barroco a su máxima expresión; las contorsiones y el color de las figuras son fiel prueba de ello. Para tal encomienda contó con la ayuda de maestros como Francisco Bellver y Llop o José Esteban Bonet. Aquel fastuoso belén fue perdiéndose con el paso del tiempo, entre las particiones hereditarias a la muerte de Carlos IV y el desinterés en que se vio sumida aquella tradición,2​ hasta que en las últimas décadas del siglo XX ha tenido un nuevo resurgir. Las piezas que aún subsisten (alrededor de treinta y dos, algunas con muchas pérdidas) fueron confiscadas junto con todos sus bienes por órdenes del Rey Fernando VII a su hermano el infante don Carlos María Isidro y depositadas en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando donde aún se conservan.

Por su parte el grupo Venus y Cupido que originalmente fue creado para decorar el Casino de la Reina, de donde pasó a las colecciones reales y a las del Museo de Arte Moderno hasta su vinculación definitiva al Museo del Prado, es un mármol de Carrara con vetas del más estricto orden estético neoclásico, toda una hazaña para un escultor que nunca salió de España. La factura clásica es absoluta, puede decirse que la antítesis en todos los sentidos de aquel colorido contorsionado barroco de las figuras de la matanza. Señalan los expertos que debió de tomar como modelo de inspiración además de los vaciados de la Academia, la famosa obra de la Venus de la Alameda de Juan Adán, que era la pieza central del Abejero del Parque de El Capricho de los duques de Osuna y que pertenece a Alicia Koplowitz.3​ La excelencia del conjunto de Ginés es tal que ha sido desde entonces una pieza de referencia en cuanto a la estética del neoclasicismo español.4​ Durante la mayor parte del siglo XX Venus y Cupido permaneció como préstamo del Prado en el Museo San Telmo de San Sebastián, aunque lamentablemente no se encuentra actualmente (2021) expuesta al público. 

 


                                       Reseña en le Museo del Prado

  José Ginés (Polop, Alicante, 1768-Madrid, 1823). Escultor español. Se formó en las Academias de San Carlos de Valencia y San Fernando de Madrid, y de esta última llegaría a ser director general en 1817. Para el futuro Carlos IV, cuando era todavía príncipe de Asturias, realizó, entre otros conjuntos, La degollación de los inocentes para el «Nacimiento del príncipe», que constaba de cinco mil novecientas cincuenta piezas. Gracias a esta colaboración llegó a ser escultor de cámara. Cultivando las tendencias más clásicas muestra en su Venus y Cupido evidentes ecos de la estatuaria helenística, a pesar de no haber salido nunca de España. En esta obra demuestra su habilidad para realzar una obra neoclásica y consigue unos volúmenes bien concebidos e integrados con gran suavidad.

 

 

 

Obra en el Museo del Prado

Bibliografía

  • El siglo XIX en el Prado, cat. exp., Madrid, Museo Nacional del Prado, 2007, pp. 386-388 y 472.

  • Pardo Canalís, Enrique, «José Ginés y los grupos de La degollación de los inocentes», Goya, Madrid, 1960-1961.

  • Arias Anglés, Enrique, Las artes, «Historia de España», Madrid, Espasa Calpe, 1989, t. XXXV.

  • Azcue Brea, Leticia, «José Ginés», La escultura en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Catálogo y Estudio, Madrid, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 1994, pp. 5, 6, 43, 60, 275, 303-332, 454-462.

  • Fuster Pérez, Joaquín, José Ginés: escultor de cámara honorario de Carlos IV. Primer escultor de cámara de Fernando VII (1768-1823), Madrid, Confederación Española de Cajas de Ahorro, 1980.

  • Gaya Nuño, Juan Antonio, Arte del siglo XIX, «Ars Hispaniae», Madrid, Plus Ultra, 1966, t. XIX.

  • Ignal Úbeda, Antonio, Diccionario biográfico de escultores valencianos del siglo XVIII, Castellón, Hijo de J. Amengot, 1933.

  • Ossorio y Bernard, Manuel, Galería biográfica de artistas españoles del siglo XIX [1883-1884], Madrid, Giner, 1975, pp. 288-289.

  • Pérez Reyes, Carlos, Del neoclasicismo al modernismo, «Historia del arte hispánico», Madrid, Alhambra, 1979, t. V.

  • Pardo Canalís, Enrique, Escultores del siglo XIX, Madrid, Instituto Diego Velázquez, CSIC, 1951.

  • Ruiz de Lihory, José, Diccionario biográfico de artistas valencianos, Valencia, Federico Doménech, 1897.