Ficus talado y arrancado. Alicante

martes, 27 de septiembre de 2011

Sello del V Centenario de la Imprenta en España




Siempre he tenido deseos de poder ver bien la letra de este sello que conmemora la V Centenario de la Imprenta. La primera línea del libro dice: “Capitulo primero dela santa fe catholica 2 de las cosas q deven ser declaradas por los curas a sus pueblos”.
Son tres sellos. Primeros impresos en Segovia en 1472 y Valencia 1474.

Sello para recordar el primer libro impreso en España. Se refiere al sínodo que, convocado en junio de 1472 por Juan Arias Dávila (Juan Arias de Ávila y González, más conocido como Juan Arias Dávila nació en 1436, Segovia – falleció en 1497, Roma) fue un político y religioso español nombrado obispo de Segovia), para corregir los desmanes en los que habían caído los clérigos de la época, desembocó en la publicación de ‘El Sinodal de Aguilafuente’, considerado como el primer libro impreso en España impreso por Juan Párix en 1472 en Segovia, es el primer libro que salió de las prensas españolas. Descubrirlo no fue sencillo: se mantuvo oculto entre los legajos del archivo de la Catedral de Segovia e incluso hubo quien lo tuvo en sus manos y no fue capaz de reconocerlo.


La Diputación de Segovia en colaboración con la Fundación Instituto Castellano Leonés de la Lengua ha realizado una edición facsímil de esta obra, en la que reproduce con gran calidad este ejemplar único que ha conseguido sobrevivir a través del tiempo. Está acompañado por un amplio estudio preliminar, realizado por el profesor Fermín de los Reyes (de donde he extraído parte de la información que aquí expongo). Dicho estudio ayuda a comprender tanto su contenido como el contexto en el que surgió. Así desde nuestra Biblioteca, os invitamos una vez más, a que acudáis a nuestro centro para poder disfrutar de esta obra.


Tan solo se conserva un ejemplar original del libro, de un incalculable valor, y está clasificado como uno de los incunables, en el Archivo de la catedral de Segovia, fue descubierto allí en 1930 por el canónigo archivero Cristino Valverde. Desde 2004 existe una cuidada edición fácsimil, editada por la Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua.